Durante los últimos años hemos sido testigos de una profunda transformación en las dinámicas en que se desarrolla la prestación de servicios o productos. La industria legal no es ajena a esos cambios, sobre todo, con el auge de la tecnología y el descontento de los clientes y abogados con el modelo tradicional. Es por ello que la innovación en la industria legal puede representar beneficios para las firmas y los clientes.
A medida que la tecnología avanza a pasos acelerados y las demandas de los clientes evolucionan, es crucial que los profesionales del derecho se mantengan al día con las últimas tendencias y adopten nuevas formas de trabajo para mantenerse competitivos en un mercado en constante cambio. Por eso, las medidas de innovación deben estar dirigidas al modelo de negocio, es decir, ir a la raíz del problema y no solo desarrollar tácticas superficiales.
¿Por qué hablar de innovación en la industria legal?
La innovación en la industria legal no solo implica la implementación de nuevas tecnologías, sino también la adopción de nuevas ideas y enfoques para resolver problemas de manera más eficiente y efectiva, mientras se brinda un buen servicio. Esto puede traducirse en la automatización de procesos, el uso de análisis de datos para mejorar la toma de decisiones, el establecimiento de precios fijos, el reconocimiento de la labor de los abogados y su humanización.
Una de las principales razones por las que la innovación es tan importante en el sector legal es porque permite a los profesionales del derecho ofrecer un mejor servicio a sus clientes. Al adoptar tecnologías, procesos más eficientes y modelos de negocio revolucionarios, los abogados pueden ahorrar tiempo y recursos, mientras brindan un asesoramiento legal integral y de alta calidad.
Otra razón por la que la innovación es esencial en la industria legal es porque permite a los profesionales del derecho adaptarse a un entorno empresarial cada vez más competitivo, pero con mejores beneficios. Aquellos que se resisten al cambio y se aferran a métodos tradicionales corren el riesgo de quedarse rezagados y perder clientes frente a competidores más innovadores y ágiles.
Formas de poner en marcha la innovación en la industria legal
Conocer al cliente: es importante entender que no hay ‘un cliente’, sino diferentes tipos, con distintas necesidades, diversas expectativas y descontento con muchas prácticas que no siempre se relacionan entre sí. Por ello, es importante prestar servicios que sean personalizados y que tengan al cliente como el centro. El centro de la innovación en la industria legal no solo debe ir dirigido al dinero que puede generar, sino también a cómo se impacta a los clientes y cómo se genera una buena relación con ellos.
Mejorar la calidad de vida de los abogados y clientes: desde hace algún tiempo se ha vuelto cada vez más común hablar sobre la importancia de la salud mental, de la satisfacción en el trabajo y de cómo hacer la vida de los abogados y clientes más fácil. Una forma muy importante de innovar es buscar estrategias para que los abogados y clientes se sientan cómodos con la prestación del servicio. Por parte de los abogados es posible hacerlo proponiendo formas de trabajo flexible, que permita que equilibren su vida personal y laboral, mientras que se les permite crecer laboralmente. Esto permite que la captación del talento legal se desarrolle de mejor manera y que se cuente con profesionales dispuestos a brindar el mejor servicio. En cuando al cliente, es posible brindándoles un servicio de alta calidad, que aborde todas las aristas del problema y que no implique gastos innecesarios para el cliente.
Legaltech: el uso de la tecnología se está volviendo cada vez más importante en la innovación en la industria legal ya que permite automatizar procesos, tanto operativos como administrativos, por lo que permite que los prestadores de servicios jurídicos centren su atención en procesos más importantes. Además, el uso de tecnología permite una mejor gestión del tiempo ya que permite organizar las tareas y permite tener más tiempo libre para desarrollar otras actividades.
Interdisciplinariedad: si bien la prestación de servicios legales se centra en brindar soluciones a necesidades legales, cada vez se vuelve más importante prestar un servicio integral que permita que las empresas se sientan acompañadas en todos los frentes. Una solución legal no tiene que ser solo legal, puede abordarse diferentes frentes que llevar al cliente al éxito. Incluso, dentro de las mismas firmas es importante incluir a profesionales de diferentes áreas que permitan mejorar la estructuración de la idea de negocio y su comunicación.
Diseño de marca y comunicación con el mercado: este tema, del que no mucho se habla, aborda la importancia de comunicar de forma disruptiva. Esto se logra desde la misma marca hasta el manejo de redes sociales y el uso de marketing. En la actualidad, la publicidad, la pauta y la creación de contenido permiten que la firma se vuelva cada vez más atractiva. La marca es muy importante, pues comunica todo lo que es la empresa. En ese sentido, es importante tenerla en constante movimiento, pues si bien la marca genera recordación, debe avanzar conforme lo haga el negocio. Esto no implica cambiar todo lo que se creó en un principio, sino que se transforme y adquiera el mismo significado que está tomando la marca. Una empresa puede iniciar como un proyecto juvenil, con un tono similar; pero transformarse con el tiempo a una marca más madura y de alto nivel, por lo que es necesario comunicar ese cambio.
En resumen, la innovación en la industria legal es fundamental para garantizar la eficacia, la eficiencia y la relevancia de los profesionales del derecho en un mundo en constante evolución. Al adoptar nuevas tecnologías y enfoques, los abogados pueden mejorar la calidad de su servicio, ampliar su alcance y mantenerse competitivos en un mercado cada vez más exigente. Por lo tanto, es crucial que los profesionales del derecho estén abiertos al cambio y estén dispuestos a innovar en beneficio de sus clientes y de la sociedad en general.
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